Hemos descubierto un pequeño valle a solo 45 minutos de Jaca, huyendo de las masificaciones lógicas producto del mes de agosto. Muy cerca de los archiconocidos valles de Hecho y Ansó, este maravilloso enclave tiene la peculiaridad de no ser muy conocido y de apenas tener turismo. Una vez llegas a la localidad de Aragües del Puerto, hay junto a la carretera y pegado al río un perfecto espacio para pernoctar con la furgoneta. Y para los amantes de la bicicleta, desde aquí, tienes una genial escalada de 8 kms. que te deja sin palabras. Los primeros kilómetros hasta el refugio de Corralones (de espectacular trato y deliciosa comida) te ayudan con falsos llanos que te permiten que la sangre circule por las piernas, pero luego queda la mitad del recorrido hasta el refugio de Lizara, al final de la carretera, con rampas del 10 y 11 por ciento que son una auténtica delicia. Además, como no tiene continuidad y finaliza en el refugio, esta carretera apenas mantiene tráfico. ¡Qué gran descubrimiento de valle!.